Bueno, vamos a liarla (contiene spoilers y flameos varios).
Es la saga en boca de todos. Tal y como pasó hace unos años con la adaptación de El Señor de los Anillos, la versión televisiva de Juego de Tronos de George R.R. Martin ha hecho que la obra de este veterano autor norteamericano salte a primera página incluso entre aquellos que no soportan la fantasía. La cadena HBO ha apostado fuerte por la producción, cuidando de respetar el libro a la vez que intentaban llegar al máximo de público posible. Una jugada redonda.
¿No será más bien el timo de la estampita elevado al cuadrado? Vayamos por partes.
A mi me gustó Juego de Tronos cuando lo leí
Es cierto, no voy a mentiros. Tengo incluso testigos (lo leí en mi antiguo trabajo en la horas de la comida) de que me sorprendió el incidente de las escaleras. Pero, echando la vista atrás, me parece que el libro no aguanta una relectura.
Oigo de fondo los gritos que claman por mi cabeza. No, no he cambiado de opinión porque sea popular (leí la novela cuando llevaba unos cuantos miles de ejemplares vendidos). Simplemente si uno se para a pensar un poco una vez acabado el libro es muy fácil darse cuenta de que Martin está vendiendo humo a base de golpes de efecto. Hay que recordar que el autor se pasó más de una década trabajando en el mundo de la televisión, donde los cliffhangers van a la orden del día.
Es la saga en boca de todos. Tal y como pasó hace unos años con la adaptación de El Señor de los Anillos, la versión televisiva de Juego de Tronos de George R.R. Martin ha hecho que la obra de este veterano autor norteamericano salte a primera página incluso entre aquellos que no soportan la fantasía. La cadena HBO ha apostado fuerte por la producción, cuidando de respetar el libro a la vez que intentaban llegar al máximo de público posible. Una jugada redonda.
¿No será más bien el timo de la estampita elevado al cuadrado? Vayamos por partes.
A mi me gustó Juego de Tronos cuando lo leí
Es cierto, no voy a mentiros. Tengo incluso testigos (lo leí en mi antiguo trabajo en la horas de la comida) de que me sorprendió el incidente de las escaleras. Pero, echando la vista atrás, me parece que el libro no aguanta una relectura.
Oigo de fondo los gritos que claman por mi cabeza. No, no he cambiado de opinión porque sea popular (leí la novela cuando llevaba unos cuantos miles de ejemplares vendidos). Simplemente si uno se para a pensar un poco una vez acabado el libro es muy fácil darse cuenta de que Martin está vendiendo humo a base de golpes de efecto. Hay que recordar que el autor se pasó más de una década trabajando en el mundo de la televisión, donde los cliffhangers van a la orden del día.
Sí, es un buen resumen del libro...
Quizás los chicos de College Humor han exagerado un poco, pero este video ilustra perfectamente algunos de los puntos débiles de la narración. La mayoría de personajes parecen tan abstraidos en sus divagaciones que no se enteran las acciones de los demás por muy visibles que estas sean.
¿Os sigue sin convencer mi opinión? Os haré una pregunta: ¿Habéis leído algún otro título de fantasía? No, Harry Potter no cuenta. Ni las franquicias de TSR. ¿Fritz Leiber? ¿Robert E. Howard? ¿Michael Moorcock? ¿Tim Powers?
Si la respuesta es no, id a la biblioteca. Y si es sí, pues ¡¿de verdad me váis a decir que Martin os ha sorprendido?!
En caso de duda, mátalos
La táctica es sencilla. Primero crea unos personajes. Cuantos más mejor, así en realidad dedicas menos tiempo a uno solo y puedes limitarte a repetir párrafos enteros con la excusa del cambio de punto de vista. Alguien con el oficio del sr. Martin tiene los huevos pelados a la hora de crear un cast y asignarles cualidades arqutípicas (el noble leal, el hijo bastardo, el rey putero, la reina más puta, el enano carismático, etc...).
Luego sólo tienes que aplicar lo que decía Kurt Vonnegut en sus reglas para escribir un libro: lánzales todo lo malo que se te ocurra. Mutílalos, humíllalos, mátalos, lo que quieras. Así verás de qué están hecho. Claro, la mayoría no habíais oído hablar de Vonnegut. Y ya puestos de Propp o de Joseph Campbell. Bueno, eso será tema para otro día...
Lo dicho: mata a un protagonista. Total, ¡tienes docenas!
El problema está que, como cualquier escritor bien sabe, a fuerza de repetir un mismo recurso narrativo quitas peso al impacto dramático del mismo. Y Martin cae en ese error como si fuera un principiante... ¡y encima le aplauden!
El ritmo narrativo tiene que ser coherente y constante. Si el listón lo pones alto (como la escenita de las escaleras) no puedes poner punto muerto y esperar a que bajes por la pendiente ahorrando combustible. Quien funciona con golpes contínuos de efecto (me viene a la mente el caso de la primera temporada de Perdidos) pronto se queda sin fuelle. Y eso se nota en la lectura. Hay un claro bajón con cada libro de la serie, que pronto se convierte en un descenso en barrena que no hay muerte que cure. Pero eso no parece importarle a la gente.
Ni siquiera el introducir nuevos puntos de vista cambia las cosas. Personajes como Cersei se convierten en una caricatura que parece sacada de Sensación de Vivir con el paso de los libros.
¿Os sigue sin convencer mi opinión? Os haré una pregunta: ¿Habéis leído algún otro título de fantasía? No, Harry Potter no cuenta. Ni las franquicias de TSR. ¿Fritz Leiber? ¿Robert E. Howard? ¿Michael Moorcock? ¿Tim Powers?
Si la respuesta es no, id a la biblioteca. Y si es sí, pues ¡¿de verdad me váis a decir que Martin os ha sorprendido?!
En caso de duda, mátalos
La táctica es sencilla. Primero crea unos personajes. Cuantos más mejor, así en realidad dedicas menos tiempo a uno solo y puedes limitarte a repetir párrafos enteros con la excusa del cambio de punto de vista. Alguien con el oficio del sr. Martin tiene los huevos pelados a la hora de crear un cast y asignarles cualidades arqutípicas (el noble leal, el hijo bastardo, el rey putero, la reina más puta, el enano carismático, etc...).
Luego sólo tienes que aplicar lo que decía Kurt Vonnegut en sus reglas para escribir un libro: lánzales todo lo malo que se te ocurra. Mutílalos, humíllalos, mátalos, lo que quieras. Así verás de qué están hecho. Claro, la mayoría no habíais oído hablar de Vonnegut. Y ya puestos de Propp o de Joseph Campbell. Bueno, eso será tema para otro día...
Lo dicho: mata a un protagonista. Total, ¡tienes docenas!
El problema está que, como cualquier escritor bien sabe, a fuerza de repetir un mismo recurso narrativo quitas peso al impacto dramático del mismo. Y Martin cae en ese error como si fuera un principiante... ¡y encima le aplauden!
El ritmo narrativo tiene que ser coherente y constante. Si el listón lo pones alto (como la escenita de las escaleras) no puedes poner punto muerto y esperar a que bajes por la pendiente ahorrando combustible. Quien funciona con golpes contínuos de efecto (me viene a la mente el caso de la primera temporada de Perdidos) pronto se queda sin fuelle. Y eso se nota en la lectura. Hay un claro bajón con cada libro de la serie, que pronto se convierte en un descenso en barrena que no hay muerte que cure. Pero eso no parece importarle a la gente.
Ni siquiera el introducir nuevos puntos de vista cambia las cosas. Personajes como Cersei se convierten en una caricatura que parece sacada de Sensación de Vivir con el paso de los libros.
En el suspense están las ventas (un libro por lustro es suficiente)
Se dice que los seguidores de Martin son los más impacientes que hay en el fandom. Y no es de extrañar. La saga pasó de la clásica periodicidad (cada par de años libro) a la friolera de ¡cinco años de espera por libro! Que sí, que ya sé que tienen mil páginas pero otros autores hacen libros más trabajados (véase Dan Simmons) y con las mismas páginas en muchísimo menos tiempo. Y no es problema de que la escritura sea tan complicada.
¡Qué cojones! ¡Si tienes tiempo para hacer entradas discutiendo los partidos de la NBA en tu blog es que no estás escribiendo!
Martin se indignó porque los fans le asaltaban en las convenciones preguntándole si "había tomado medidas para prevenir un posible escenario de to do a Jordan", eufemismo traducible literalmente como "hacer un Jordan" por el fallecido autor de La Rueda del Tiempo (que dejó su saga inacabaca a su muerte, completada posteriormente por Brandon Sanderson).
¿Hielo y Fuego? ¡No, gracias!
Me quedo corto pero no me apetece divagar durante horas. Esto es un rant, no un intento de convertiros al antimartinismo. Lo que pasa es que yo me cansé ya hace algunos años de regalarle dinero a GRRM por mil páginas de aburrimiento y repetición. Ni siquiera he visto la serie de TV(a lo mejor me animo cuando salga en bluray) porque no me apetecía dedicar 10 horas a algo que no me iba a sorprender, por muy cuidado que esté.
En cuanto a vosotros podéis esperar otros cinco años (o más) a que salga el siguiente volumen de la saga. A mí no me va a quitar el sueño.
P.D.: Por motivos obvios la Regla de Oro (ver barra lateral) se va a aplicar en esta entrada a rajatabla. Es más, como probablemente habrá fanboys/fangirls, trolls y flamers indignados me reservo el hecho de publicar los comentarios que me apetezcan. Mi casa mis reglas (y no, esto no es una democracia).
P.D. 2: No os hagáis mala sangre, que os saldrá una úlcera. Se puede observar la opinión opuesta a la propia sin que por ello os encendáis.
Se dice que los seguidores de Martin son los más impacientes que hay en el fandom. Y no es de extrañar. La saga pasó de la clásica periodicidad (cada par de años libro) a la friolera de ¡cinco años de espera por libro! Que sí, que ya sé que tienen mil páginas pero otros autores hacen libros más trabajados (véase Dan Simmons) y con las mismas páginas en muchísimo menos tiempo. Y no es problema de que la escritura sea tan complicada.
¡Qué cojones! ¡Si tienes tiempo para hacer entradas discutiendo los partidos de la NBA en tu blog es que no estás escribiendo!
Martin se indignó porque los fans le asaltaban en las convenciones preguntándole si "había tomado medidas para prevenir un posible escenario de to do a Jordan", eufemismo traducible literalmente como "hacer un Jordan" por el fallecido autor de La Rueda del Tiempo (que dejó su saga inacabaca a su muerte, completada posteriormente por Brandon Sanderson).
¿Hielo y Fuego? ¡No, gracias!
Me quedo corto pero no me apetece divagar durante horas. Esto es un rant, no un intento de convertiros al antimartinismo. Lo que pasa es que yo me cansé ya hace algunos años de regalarle dinero a GRRM por mil páginas de aburrimiento y repetición. Ni siquiera he visto la serie de TV(a lo mejor me animo cuando salga en bluray) porque no me apetecía dedicar 10 horas a algo que no me iba a sorprender, por muy cuidado que esté.
En cuanto a vosotros podéis esperar otros cinco años (o más) a que salga el siguiente volumen de la saga. A mí no me va a quitar el sueño.
P.D.: Por motivos obvios la Regla de Oro (ver barra lateral) se va a aplicar en esta entrada a rajatabla. Es más, como probablemente habrá fanboys/fangirls, trolls y flamers indignados me reservo el hecho de publicar los comentarios que me apetezcan. Mi casa mis reglas (y no, esto no es una democracia).
P.D. 2: No os hagáis mala sangre, que os saldrá una úlcera. Se puede observar la opinión opuesta a la propia sin que por ello os encendáis.
jajajajaajja, suscribo casi todo lo dicho. especialmente lu último. Es mi casa y son mis reglas.
ResponderEliminarComo escritor es un poco plasta conforme van avanzando los libros. A mí me desagradó especialmente el 4. NI UN SOLO CAPITULO DEL BASTARDO NIEVE.
Yo voto por que este tío va a hacer un Jordan, que es muy abuelete...
ResponderEliminarHombre, sí es cierto que abusa de golpes de efecto, no lo voy a negar. Pero lo cierto es que son entretenidas. Y sep, el vídeo es un buen resumen XD
Otro detractor por aquí, yo directamente no opinaré, porque de GRRM no aguanto nada.
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