Barcelona 17-8-17

Hoy iba a ser un buen día. Para empezar, se abre la Gen Con 50, un evento que intento cubrir cada año desde mi rincón de la blogosfera. El que sea una edición tan señalada (¡50 años ya!) hace que sea un año especial. Además, hoy había quedado con los amigos que se fueron a vivir a Suiza hace más de 20 años. Iba a conocer por fin a sus tres hijas, de las que solo he visto fotografías en las contadas veces que nos hemos visto en estas dos últimas décadas.

Un acto cobarde y monstruoso ha cambiado todo esto.

Yo he tenido suerte. En principio, no hay ningún familiar o conocido que se haya visto afectado por esta tragedia. Mis amigos están bien y se van mañana muy pronto a Suiza. Ya habrá otras oportunidades de vernos.

Podría dejarme llevar por la ira y escupir odio desde estas líneas, tal y como he visto hacer a muchas personas durante las últimas horas en las redes sociales. Pero no lo voy a hacer. Odiar es el camino sencillo. El odio nubla la mente y solo sirve para alimentar más odio.

Podemos pasar horas analizando los motivos, pero la historia es la misma en cualquier parte del mundo: mientras existan ghettos y condenemos a la pobreza a comunidades enteras, estos monstruos tendrán soldados ilimitados. Compasión, empatía, integración, respeto, ayuda y tolerancia son las únicas herramientas que conseguirán borrar esta lacra del mundo. No las bombas ni la violencia. No el decir que han sido "ellos". No el odiar las diferencias.

Este mundo es de todos. Y es responsabilidad de todos nosotros el hacer lo posible para conseguir un mundo mejor. Especialmente en estos momentos de dolor.

Para intentar mantener la cordura, voy a seguir con la cobertura de la Gen Con.

ADVERTENCIA: No voy a tolerar ninguna clase de insulto, ni muestras de odio, xenofobia, racismo y similares. Lo digo muy en serio. El que se pase de listo, lo bloqueo.