Hoy es el Día Internacional de la Mujer, una jornada de manifestación, protesta y reivindicaciones en forma de huelga feminista. Podría hacer una entrada kilométrica acerca de los motivos por los que la jornada de hoy es necesaria; las reformas, más que justas, y la huelga, uno de los pocos recursos que les queda, pero no lo voy a hacer. Las mujeres han explicado todo esto y más durante años. Lo que pasa es que hay mucha gente que no quiere o no puede escucharlas porque les niegan los espacios e invisibilizan su mensaje.
Y eso es algo que hay que cambiar.
Hoy ya hemos visto a más de un político de turno hacer sus números machistas, no sea que sus bases perciban debilidad de cara a las próximas elecciones. No seáis como ellos.
La lucha por la igualdad real, para la equiparación de derechos y contra la violencia de género nos atañe a todes. Es una lucha en la que las mujeres han de llevar las riendas. En este punto, no cabe discusión alguna, pero esto es algo parece que le cuesta aceptar a los más conservadores y a algunos políticos y sindicalistas que se quieren colgar medallas en esta jornada después de ver el tremendo éxito de la huelga que organizaron las mujeres el año pasado. Sin embargo, hay cosas que podemos hacer, que tenemos que hacer. Podemos servir de «colchón de seguridad» para reducir y deflectar cualquier ataque al movimiento. al sumar nuestra voz a la suya. Cuantas más voces se sumen a la protesta, más difícil es hacer que calle. Mirad lo que ha pasado con el mierdas de ZS: mientras nadie alzara su voz, podía actuar libremente, pero una vez se empezaron a unir voces, no pudo evitar que el maremoto se lo llevara. Podemos convertir espacios no feministas a los que tenemos acceso en feministas, dando voz al movimiento en un lugar al que no llegaba. Podemos crear espacios seguros para que las mujeres puedan reunirse y avanzar en la causa del feminismo o para desconectar y recuperar energías.
El apoyar las acciones como esta huelga debería ser algo incustionable, el estado «normal» de las personas. El feminismo no busca imponerse sobre nadie ni busca copiar los privilegios de los que se vanagloria el machismo, sino que quiere alcanzar la igualdad para las mujeres, para todas las mujeres, porque cree en la igualdad real de todas las personas. O, como más de una feminista lo define, el feminismo busca que se trate a las mujeres como personas. Es triste, pero por desgracia, esto ocurre hasta en los países que se «autodenominan» modernos.
El futuro es feminista. Y vuelvo a recalcar que, cuando hablo de feminismo y de mujeres, me refiero a un feminismo inclusivo y transversal, que incluye a todas las mujeres, en especial a las mujeres racializadas, a las mujeres trans y a cualquier persona que se identifique como mujer, que por desgracia no todas les feministas quieren ver como hermanas.
Intento que Play It Again, Sam sea un blog inclusivo, realizado desde una perspectiva feminista. Por ello, he tratado los casos de acoso y abusos sexuales que se han denunciado en el mundo de los juegos de rol, mientras la gran mayoría de blogs de la rolosfera patria ha preferido callar, mirar para otro lado o directamente se ha quejado de que se trataran estos temas. Y lo seguiré haciendo. No quiero medallas ni reconocimientos por hacer lo que considero que es lo correcto.
Sin feminismo, no hay futuro. Por ello, este 8 de marzo, vuelvo a reiterar mi compromiso con una causa que es la defensa de un derecho inalienable.
Para todas las mujeres: ¡Fuerza, hasta la victoria!
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