Parece que fue ayer cuando me regalaron la caja roja de D&D de Dalmau Carles para mi cumpleaños, pero fue en 1989. Desde entonces ha llovido un poco. Me han pasado cosas buenas y malas. He tenido la suerte de conocer a mucha gente a la que llamar amigos, dentro y fuera de este mundillo. Me han publicado un ensayo, una novela, un par de relatos breves y hasta casi un juego de rol (esa historia es para otro momento). Mientras escribo estas líneas está terminando el día en el que entro en una nueva década y quiero pensar que con 40 años soy algo más sabio (¡porque sí que he perdido algunos puntos en Destreza!).
Mi clon malvado/gemelo gatuno International Khiladi (que como buen hermano gemelo también cumple los 40) hace días que me había regalado la edición española del Ryuutama, cuyo mecenazgo está a punto de finalizar, pero ha decidido que había que celebrarlo por todo lo alto y ha aparecido con una montaña de regalos roleros. ¡Y qué regalos!
Lo primero ha sido el material más nuevo: la pantalla de Numenera en castellano, el Ninth World Guidebook y el set de dados de Q-workshop para Numenera. Como estoy preparando campaña del excelente juego de Monte Cook, todo esto me va a venir de perlas.
¡Numenera!
Cuando le estaba dando las gracias y le iba a decir que se había pasado con el regalo, mi hermano ha sonreído como cuando está a punto de hacer una de las suyas en una partida y ha empezado a sacar material clásico. La cara que he puesto ha tenido que ser todo un poema.
No hay para menos porque por arte de magia han aparecido en mis manos un ejemplar de Pendragón de la edición de Joc Internacional, así como los suplementos Caballeros aventureros y Magia céltica.
¡Y en perfecto estado!
Todavía me estaba recuperando cuando han hecho su aparición un ejemplar de Nephilim y uno de Selenim, dos verdaderas joyas que hacía mucho que buscaba. Creo que aquí es cuando he empezado a balbucear.
¿No querías caldo? ¡Toma dos tazas! ¡Nuevos y retractilados!
La traca final ha sido uno de los juegos más buscados y que hacía años que no veía. ¡Un ejemplar de Deadlands!
Tiene que ser un espejismo...
¡Muchas gracias por estos tremendos regalos, hermano! ¡Te has pasado mil pueblos!
Y, como no, ¡feliz cumpleaños a ti también!
Y, como no, ¡feliz cumpleaños a ti también!
Las caras que ibas poniendo eran para grabarte, sobre todo al ver el Deadlands XDDDD
ResponderEliminar¡A disfrutarlo y feliz cumpleaños!
Me encanta leer este tipo de entradas que os marcáis por vuestros cumpleaños. Si, tenía pinta de que haberlo visto en directo debía ser genial.
ResponderEliminarMuchas felicidades y a disfrutar de todos esos juegos :D
Un abrazo.
¡Muchas gracias! Me quedé con cara de tonto a medida que aparecían juegos clásicos de la época de Joc International :D
Eliminar